miércoles, octubre 22

La espalda del mundo.






Esta producción de Elías Querejeta es un documental que nos narra tres historias, cuyo único punto en común es la marginalidad.


El niño.
La vida de los niños peruanos del extrarradio de Lima, que en lugar de ir a la escuela se pasan el día picando piedras, es un relato tierno y duro a la vez. Escuchar cómo hablan de los problemas de los adultos, cómo razonan su obligación al trabajo, cómo se sienten responsables de sus familias; y a la vez verlos jugar al fútbol con ilusión, o contar sus aspiraciones en la vida (el protagonista de esta historia quiere ser contable) te devuelve a la infancia y a la inocencia de los primeros años. Sin embargo, la realidad es bien distinta: esos niños no saldrán de ese extrarradio donde, por azar, les ha tocado vivir, y que no existe para la gente que vive en la ciudad.


La palabra.
La persecución del pueblo kurdo en Turquía es siempre un tema de actualidad, aunque lo obviemos tantas veces. La violencia física en las aldeas kurdas; y la psicológica contra los que se levantan por un hermanamiento entre los dos pueblos, es el pan de cada día. Mehdi Zana está exiliado en Suecia, y probablemente morirá sin ver cumplido su último sueño: volver a su pueblo, con su gente, y con
su mujer, Leyla Zana, hoy en la cárcel después de haber sido elegida diputada y pedir en el Parlamento libertad de expresión. El drama de un pueblo obligado a callarse, y a sufrir por los familiares muertos o encarcelados, continuará sin que la tan democrática 'comunidad internacional' se atreva a plantar cara a unos hijos de puta de los suyos.

La vida.
La historia de Thomas Miller es desgarradora; lleva catorce años en el corredor de la muerte del estado de Texas, y ya ha tenido diez fechas de ejecución; sigue sufriendo y, tal vez, sabiendo que, a pesar de todo, le llegará el día de la inyección letal. Más que los testimonios de los condenados y sus familiares, lo que más me impacta son las declaraciones de los funcionarios y del cura. No puedo entender cómo una persona se puede tomar con tanta frialdad un asesinato (bueno, se niegan a usar ese término, y utilizan el eufemismo 'ejecución'). Así se aliviará el sufrimiento del asesinado por el condenado. ¿De verdad lo creen?

http://www.imdb.com/title/tt0264584/





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